sábado, 24 de abril de 2010
Sostenibilidad
A raiz de una conversacion con un amigo acerca de la sostenibilidad y de las medidas estatales para prevenir las catastrofes ecologicas mediante leyes, impuestos, etc, saque a relucir una historia que había leido acerca de una catastrofe ecologica que se avecinaba sobre las ciudades de finales del siglo XIX. Los expertos de la epoca no sabían que hacer e inesperadamente la solucion apareció sin que nadie lo esperara, ni que ningun politico la imaginara.
Concretamente os contaré cual era esa catastrofe ecologica que sufría la ciudad de Nueva York.
En 1900 la populosa ciudad de nueva york tenía 3.347.000 habitantes y 100.000 caballos que era el medio de transporte de la epoca. Un caballo produce unas 10 kilogramos de excrementos al dia.
Imaginaos el hedor que quedaría en las calles, la mierda se acumulaba en las aceras, junto a los establos, Miles de moscas acudían, que podían transmitir enfermedades como la fiebre tifoidea.
Las tipica calle Neoyorkina con las entradas con escaleras en la calle son así debido a que se hacian para sobreelevarlas sobre la caca de caballo, que como he dicho se amontonaba en las aceras.
La contaminacion tambien era auditiva, quizas no tanto como una motocicleta con el tubo de escape trucado, pues unas ruedas metalicas traqueteando sobre los adoquines hacía mucho ruido.
Además los caballos se morían, a veces en la misma calzada, y los encargados de recoger el animal a veces esperaban que se pudriese para poder cortarlo en trozos y así transportarlo mas facilmente.
Por todas estas razones habían estudios (sostenibles) que alertaban del probable e inminente colapso de la ciudad si seguía creciendo la población equina. Nadie veía una solucion al problema que no fuera prohibir los caballos o al menos algunos de ellos.
...Y entonces, llegó la solución...
El automovil, y la produccion en cadena del mismo. La contaminación por humos de los coches a motor no era molesta en comparacion con el mal olor de la caca de caballo por todos sitios.
La moraleja de esta historia es la siguiente: NO CONOCEMOS LOS PROXIMOS AVANCES CIENTIFICOS, Y HACER PREDICCIONES A MUY LARGO PLAZO SIN CONOCER LOS RECURSOS QUE TENDREMOS EN ESA FECHA ES ARRIESGADO.
Los habitantes de Nueva York se podrían haber puesto a sacrificar caballos, para prevenir un futuro asqueroso en la ciudad que la hubiera hecho inhabitable. Sin duda eso hubiera retrasado el progreso economico de la ciudad.
Yo lanzo una pregunta: ¿pudiera ser que una nueva energia desconocida ahora solucione el problema de la contaminacion por humos en las ciudades?
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